lunes, 28 de agosto de 2017

Carta al presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).


  

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 27 de agosto del 2017.
Doctor Enrique Ochoa Reza.
Presidente del CEN del PRI.
Presente.
Como mujer, como chiapaneca y como militante de mi partido, el Revolucionario Institucional (PRI), siempre he aspirado a servir a mis compañeros y, desde luego, a buscar presidir mi partido. Las mujeres gobernamos muy bien. Las mujeres hacemos organizaciones y gobiernos plurales, honestos y con gran fuerza social.
Hace unas tres semanas anuncie que me registraría para participar en el proceso interno para la elección de los titulares de la presidencia y de la secretaria general del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Chiapas.
Las elecciones del 2018 serán históricas para las chiapanecas y los chiapanecos: en nuestro estado se elegirá presidente de la República, Gobernador, Senadores, Diputados federal y se cambiará la totalidad del Congreso local y las 124 presidencias municipales.
La unidad de todos los sectores y la base priista es fundamental para la estrategia electoral del 2018 y vital para tener triunfos contundentes.
El presidente Enrique Peña Nieto anunció, el 11 de octubre 2013, que había enviado al Senado la iniciativa para modificar el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) con el objeto de garantizar el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres. El Senado de la República lo aprobó el 4 de diciembre de 2013 y reformó el artículo 41 Constitucional para incorporar la paridad de género en candidaturas al poder legislativo federal y local.
La Reforma en materia Político-Electoral es un paso gigantesco hacia la equidad de género, al reconocer el papel central que deben tener las mujeres en la toma de decisiones en los partidos y en el país. La reforma del presidente de la República, Enrique Peña Nieto, es vital hacia la consolidación de la democracia en México.
La reforma fue un aliciente para las mujeres chiapanecas que, estaban seguras, que cambiaría el escenario en el 2018. No tengo duda de que ahora existen las condiciones para despegar una verdadera participación de las mujeres en la política.
Señor Presidente:
La nueva dirigencia estatal de nuestro partido debe mantener la inclusión de la igualdad de género en su agenda; pues uno de sus objetivos primordiales deberá ser la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres para alcanzar mayores grados de igualdad entre las priistas y los priistas.
Los hombres y las mujeres deben contar con las mismas oportunidades en la política.
Me parece fundamental dejar claro que la teoría de género no habla de y para las mujeres, si no que se dirige de igual manera a mujeres y hombres proponiendo una transformación de las relaciones de poder y, por tanto, una transformación de la sociedad.                                                                                                
Estimado Presidente:
En Chiapas aún se mantienen cacicazgos, grupos de poder político dentro del PRI – todos encabezados por hombres- que no permiten el avance de las mujeres que hacemos política y queremos trabajar por el partido.
En los últimos seis años hemos trabajado en el empoderamiento de las mujeres chiapanecas, la capacitación ha sido fundamental, pero sobre todo la Reforma político electoral de género propuesta por el presidente Enrique Peña Nieto fue fundamental para avanzar en la participación del sector femenino en la política.
Las mujeres hemos caminado un buen trecho en ser políticas y estar en la política. Eso no ha disuelto a los grupos de poder dentro del partido que se niegan a darle la estafeta a las priistas. Lo más grave es que el avance de las mujeres no ha logrado que los grupos políticos que mantienen secuestrado al partido desaparezcan, al contrario, la violencia política de género es ahora una constante en Chiapas.
Las elecciones de julio del 2015 fue el inicio de la Violencia Política Contra las Mujeres. Los últimos comicios en otros estados dejaron en claro la urgente necesidad de legislar sobre la materia, pues es vital definir a la violencia política en razón de género, como la acción u omisión que, en el ámbito político o público, limite, anule o menoscabe el ejercicio efectivo de los derechos político-electorales de una mujer.
Es necesario tipificar y castigar a toda persona, institución, partido político o funcionario que hiciera uso de la violencia para afectar políticamente a una mujer. Las propuestas para castigar la violencia política contra el género femenino deben ser severas.
Quiero insistir que el objetivo principal de la política debe ser servir, no servirse. Pero hay quienes han perdido o nunca han tenido esa vocación de servicio. Y he aprendido que en política conciliar y buscar la unidad es necesario ceder, pero sé que nunca cederé ante una injusticia o contra lo que atente contra los principios del partido.
Todo este triste y preocupante panorama de la permanencia de grupos caciquiles de poder dentro del partido que me han bloqueado permanentemente en el ejercicio de mis derechos políticos me han llevado a decidir:  no inscribirme como candidata a la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI en Chiapas, porque no existen las condiciones ni piso parejo para los que aspiramos a la presidencia del PRI en Chiapas.
Señor Presidente, ojalá aplace la convocatoria y evite una imposición en el CDE del PRI en Chiapas.
 Agradezco la atención prestada a la presente carta.

                                                    Rita Guadalupe Balboa Cuesta
                                                    Militante del PRI en Chiapa

c.c.p.- Carlos Hiriarte Mercado, delegado del CEN del PRI en Chiapas.
c.c.p.- Senadora Hilda Flores Escalera, presidenta del CEN del ONMPRI.
c.c.p.- Senadora Diva Gastélum Bajo, secretaria de Atención para Estados en                                                                                                                       Oposición.
                           


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