Quiero agradecer a todas y todos los compañeros priistas que me han hablado preocupados por las declaraciones que hice el fin de semana. Sus correos y sus llamadas telefónicas fortalecen mi trabajo a favor de las mujeres chiapanecas. Fueron tantas que provocaron una gran reflexión sobre la política actual en Chiapas y en México. No se preocupen, una mujer convencida de su partido no abandona el barco aún cuando este se esté hundiendo. Lo que si les puedo reiterar con seguridad es que las mujeres chiapanecas no dejaremos que nuestros derechos sean pisoteados. Hay por lo menos cinco mujeres, entre las que me incluyo, de diferentes distritos electorales de Chiapas que han expresado su deseo de participar en el proceso interno del PRI. Ellas tienen los mismos derechos que los compañeros priistas. Ellas tienen liderazgo en sus distritos y regiones. Ellas se han ganado el derecho a participar. Tenemos confianza en que el partido haga realidad la equidad de género y paridad electoral. Tengan la seguridad que las chiapanecas no seremos tratadas como simples juanitas electorales o de la política aldeana.
¡Vamos por un PRI de libertades, en democracia con equidad de género y paridad electoral¡
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